jueves, 4 de marzo de 2010


A ti te estoy hablando a ti, a ti el que no escucha. A ti que con lo que te sobra me darías la luz para encender los días, a ti que juegas a ganarme cuando sabes bien que lo he perdido todo... A ti te estoy hablando a ti aunque te importe poco lo que estoy diciendo. A ti te estoy hablando a ti aunque es perder el tiempo, a ti que te pasó tan lejos el rigor del llanto y la melancolía. Si nunca dije la verdad fue porque la verdad siempre fue una mentira; a ti te estoy hablando a ti aunque te valga madre lo que estoy diciendo. A ti que te faltó el valor para pelear por ti... A ti que por despecho estás pensando con los pies, a ti que me dejaste sola incluso cuando estabas en mi compañía. A ti ya no te queda nada, nada. A ti te estoy hablando a ti; tan sordo y resignado. A ti que duermes con tu o r g u l l o y te dejas tocar con tu rencor barato, a ti que te gusta ir de mártir repartiendo culpas que son solo tuyas, a ti te estoy hablando a ti porque no hay nadie más que entienda lo que digo.